11.7.08

El futuro rojo de Alonso

Completado la mitad del campeonato del mundo de F1 es buen momento para analizar el posible futuro de Fernando Alonso, muy de actualidad estos días.


Retoma fuerza la opción Ferrari. Y es que la Scuderia le quiere desde hace años, en concreto el presidente de Ferrari, Luca Cordero di Montezemolo. A su fichaje se oponía Jean Todt, quien como herencia ha dejado a Felipe Massa renovado hasta el 2010 (y todo como gran favor a su hijo, que es el mánager de Felipe), pero ahora Jean Todt ya no pinta nada en la gestión deportiva que corre a cargo de Stefano Domenicali. Las duda es en lugar de quién llegaría, pero todo hace suponer que el damnificado sería Felipe Massa, quien en 4 carreras de las 9 disputadas ha cometido gravísimos errores, demostrando que no da la talla para el Cavallino. De modo que, presumiblemente, en 2010 podríamos ver la pareja compuesta por 2 campeones del mundo, Alonso y Raikkonen, aunque Kimi no sería campeón de no haber sido por el bochornoso espectáculo ofrecido por McLaren el año pasado. Simplemente Fernando es mejor que el finlandés, pese a quien pese.


Ahora acaba de destaparse una nueva información que está cogiendo gran fuerza y que consiste en que el Banco Santander rompería su contrato (o esperaría a que expirara) con McLaren y empezaría a patrocinar a Ferrari, potenciándose su imagen publicataria por el hecho de compartir color corporativo con el fabricante de automóviles italiano. Sin duda sería una operación redonda que esperemos ocurra lo antes posible.


La opción BMW está ahí, como gran alternativa, pero parece que está perdiendo algo de fuelle últimamente. Kubica y Alonso formarían una pareja formidable y además resulta que son buenos amigos. Red Bull sigue muy atento el desenlace, pues con el puesto vacante de Coulthard parece que no dudarían en ofrecer todo por el asturiano, aunque eso vaya en detrimento de la joya alemana Sebastian Vettel. Y Honda son los últimos en sumarse a la terna de candidatos, con un Ross Brawn especialmente interesado en su contratación y con el rumor de la posible implicación de Repsol como patrocinador que costease su fichaje por la casa japonesa. Y a pesar de todo queda la opción de arrastrarse otro año con Renault, cuyo ciclo parece que finalmente ha tocado techo y deberá replantearselo todo.

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